Mi universo es un poco como lo que verás en esta página web: un caos ordenado, o relativamente ordenado. Imágenes y palabras; códigos de biblioteca para poderse agarrar a algo; normas lingüísticas llenas de excepciones; idiomas que se relacionan entre ellos en un diálogo constante y a veces incomprensible. La Antigüedad, como un mapa para el viaje; la literatura, su leyenda para entenderlo. La búsqueda de lo bello y el deseo de comprender el pasado para transformar el futuro, o al menos, para traer luz al presente.

No empecemos con mal pie. En la ilustración que acompaña a este texto, por si no lo sabes, pone: «Mi nombre es Nadie». Así escapó Odiseo, que era muy listo, de Polifemo, y así escapo yo de más presentaciones. No te fijes en mí, echa un vistazo a mi trabajo. Si te quedas con algo, por favor, que sea con ellas: con las imágenes y con las palabras. Es el poder de ellas lo que puede cambiar el mundo.